La Nictofobia es una fobia caracterizada por un miedo severo a la oscuridad. Se desencadena por la percepción desfigurada del cerebro de lo que sucedería o podría suceder en un entorno oscuro. También puede activarse temporalmente si la mente está inestable o asustada por eventos o ideas recientes, o si participa en contenido que el cerebro considera una amenaza (ejemplos podrían incluir caer en contenido de terror, presenciar acciones vulgares o haber vinculado entornos oscuros a eventos o ideas anteriores que perturban la mente)., Normalmente, ya que los seres humanos no son nocturnos por naturaleza, los seres humanos suelen ser un poco más cautelosos o alertas por la noche que en el día, ya que la oscuridad es un entorno muy diferente. La nictofobia produce síntomas más allá de los parámetros instintivos normales, como dificultad para respirar, sudoración excesiva, náuseas, sequedad de boca, sensación de malestar, temblores, palpitaciones cardíacas, incapacidad para hablar o pensar con claridad o sensación de desprendimiento de la realidad y la muerte. La nictofobia puede ser gravemente perjudicial física y mentalmente si estos síntomas no se resuelven., Hay muchos tipos de terapias para ayudar a controlar la Nictofobia. La terapia de exposición puede ser muy efectiva cuando se expone a la persona a la oscuridad. Con este método, un terapeuta puede ayudar con estrategias de relajación como la meditación. Otra forma de terapia es la Terapia Cognitiva Conductual. Los terapeutas pueden ayudar a guiar a los pacientes con rutinas de comportamiento que se realizan diariamente y todas las noches para reducir los síntomas asociados con la Nictofobia., En los casos graves, los antidepresivos y los medicamentos contra la ansiedad pueden ser efectivos para aquellos que enfrentan síntomas que pueden no ser manejables si la terapia no puede reducir los síntomas de la Nictofobia.
a pesar de su carácter omnipresente, ha habido una falta de investigación etiológica sobre el tema. La nictofobia se observa generalmente en los niños, pero, según el artículo de J. Adrian Williams «terapia hipnótica indirecta de la Nictofobia: un Reporte de caso», muchas clínicas con pacientes pediátricos tienen una gran probabilidad de tener adultos que tienen nictofobia., El mismo artículo afirma que «se ha sabido que la fobia es extremadamente disruptiva para los pacientes adultos y INCAP incapacitante».
la palabra nyctophobia viene del griego νυκτός, nyktos, genitivo de νύξ, nyx, «noche» y φόβος, phobos, «miedo». El miedo a la oscuridad o a la noche tiene varias terminologías no clínicas: lygophobia, scotophobia y achluophobia.