El anclaje es una forma particular de efecto de cebado por el cual la exposición inicial a un número sirve como punto de referencia e influye en los juicios posteriores. El proceso generalmente ocurre sin nuestro conocimiento (Tversky & Kahneman, 1974) y ha sido investigado en muchos contextos, incluyendo estimaciones de probabilidad, juicios legales, pronósticos y decisiones de compra (Furnham & Boo, 2011).
Un experimento pidió a los participantes que anotaran los últimos tres dígitos de su número de teléfono multiplicado por mil (p. ej., 678 = 678,000). Los resultados mostraron que la estimación posterior de los precios de la vivienda de las personas se vio significativamente influenciada por el anclaje arbitrario, a pesar de que se les dio una presentación de 10 minutos sobre los hechos y cifras del mercado de la vivienda al comienzo del estudio. En la práctica, los efectos de anclaje a menudo son menos arbitrarios, ya que es evidente que el precio de la primera casa que nos muestra un agente inmobiliario puede servir como ancla e influir en las percepciones de las casas que se nos presentan posteriormente (como relativamente baratas o caras)., Los efectos de anclaje también se han demostrado en la categoría de bienes de consumo envasados, por lo que no solo eslóganes explícitos para comprar más (por ejemplo, «compre 18 barras de Snickers para su congelador»), sino también límites de cantidad de compra (por ejemplo, «límite de 12 por persona») o «anclajes de expansión» (por ejemplo, » 101 usos!») puede aumentar las cantidades de compra (Wansink et al., 1998).Furnham, A., & Boo, H. C. (2011). Una revisión bibliográfica del efecto de anclaje. The Journal of Socio-Economics, 40 (1), 35-42.
Tversky, A., & Kahneman, D. (1974)., Judgment under uncertainty: Heuristics and biases (en inglés). Science (New Series), 185, 1124-1131.